Informa CaravacaDeportes
El oficio de payaso es uno de los más dignos, una persona que se dedica hacer reír, que no es nada fácil. Pero este trabajo tiene también un adjetivo con el cual podríamos definir algunas personas incompetentes dentro de la cúpula del fútbol murciano, (Payaso: se dice de la persona poco seria en sus acciones o palabras, propensa a hacer reír a los demás) eso es lo que ha provocado las declaraciones de Monje Carrillo con sus declaraciones al diario La Verdad de Murcia de hoy sábado: «en esta Territorial estamos atados de pies y manos. La Segunda B es una competición dependiente de la Federación Española y federativamente es legal que un equipo de fútbol juegue en la localidad que elija, siempre que sea de la misma provincia».
Y digo yo ¿y para que están estos cargos?, para pasar la pelota de uno a otro, como es el caso, es que usted, que reconoce la ilegalidad realizada por estas personas entre ellas un intimo amigo suyo como es Pepeillo Murcia, perdón Don José Murcia, con el cual usted mantiene multitud de reuniones y conversaciones, ¿no le dio el visto bueno y respaldó, al traslado del Caravaca C.F., con un informa favorable.?
Es vejatorio para los caravaqueños sus declaraciones: «lo ocurrido entre Caravaca y La Unión es más complejo que el mero hecho de jugar en un campo u otro. Por este motivo, si en Caravaca entienden que se ha registrado una ilegalidad porque ese traslado no ha sido autorizado por una asamblea de socios, el camino que tienen es el de los tribunales de Justicia». Como esta persona, (me refiero a José Miguel Monje Carrillo) designada para velar por el fútbol en la región, hacer cumplir las normas e intentar solucionar los problemas, es participe de estas manipulaciones a sabiendas, e instar a que se vaya a la justicia lavándose las manos al igual que Poncio Pilatos.
Casi amigo Monje Carrillo, no todo se basa en invitaciones gastronómicas para conseguir fines de terceros, usted no es digno de jugar con una Ciudad y sus habitantes de la manera que lo esta haciendo, no es digno de llevar en su pecho colgada lo que identifica a las personas de buen corazón y a los caravaqueños. Basta ya de capotear, de la cara y reconozca que usted es parte de esta trama ilegal, ya que consiente, que dios le pille confesado.
AL FINAL DE LA VIDA CADA UNO QUEDARA EN EL LUGAR MERECIDO
El oficio de payaso es uno de los más dignos, una persona que se dedica hacer reír, que no es nada fácil. Pero este trabajo tiene también un adjetivo con el cual podríamos definir algunas personas incompetentes dentro de la cúpula del fútbol murciano, (Payaso: se dice de la persona poco seria en sus acciones o palabras, propensa a hacer reír a los demás) eso es lo que ha provocado las declaraciones de Monje Carrillo con sus declaraciones al diario La Verdad de Murcia de hoy sábado: «en esta Territorial estamos atados de pies y manos. La Segunda B es una competición dependiente de la Federación Española y federativamente es legal que un equipo de fútbol juegue en la localidad que elija, siempre que sea de la misma provincia».
Y digo yo ¿y para que están estos cargos?, para pasar la pelota de uno a otro, como es el caso, es que usted, que reconoce la ilegalidad realizada por estas personas entre ellas un intimo amigo suyo como es Pepeillo Murcia, perdón Don José Murcia, con el cual usted mantiene multitud de reuniones y conversaciones, ¿no le dio el visto bueno y respaldó, al traslado del Caravaca C.F., con un informa favorable.?
Es vejatorio para los caravaqueños sus declaraciones: «lo ocurrido entre Caravaca y La Unión es más complejo que el mero hecho de jugar en un campo u otro. Por este motivo, si en Caravaca entienden que se ha registrado una ilegalidad porque ese traslado no ha sido autorizado por una asamblea de socios, el camino que tienen es el de los tribunales de Justicia». Como esta persona, (me refiero a José Miguel Monje Carrillo) designada para velar por el fútbol en la región, hacer cumplir las normas e intentar solucionar los problemas, es participe de estas manipulaciones a sabiendas, e instar a que se vaya a la justicia lavándose las manos al igual que Poncio Pilatos.
Casi amigo Monje Carrillo, no todo se basa en invitaciones gastronómicas para conseguir fines de terceros, usted no es digno de jugar con una Ciudad y sus habitantes de la manera que lo esta haciendo, no es digno de llevar en su pecho colgada lo que identifica a las personas de buen corazón y a los caravaqueños. Basta ya de capotear, de la cara y reconozca que usted es parte de esta trama ilegal, ya que consiente, que dios le pille confesado.
AL FINAL DE LA VIDA CADA UNO QUEDARA EN EL LUGAR MERECIDO
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