J. GARRO BADAJOZ.
Eliminar en dieciseisavos al San Roque, vigente campeón, fue un regalo envenenado. Esta tarde, el Jerez afronta el partido de ida de octavos de la Copa Federación en Caravaca (Murcia). Lo hace sin apenas efectivos (el once y tres cambios, no hay más) y con la mente puesta en los dos puntos que le separan de la cuarta plaza para optar al ascenso a Segunda B, su auténtica prioridad.
El domingo al mediodía, en Plasencia ante el Ciudad, el Jerez tiene otra oportunidad de presionar al Moralo, su rival liguero más próximo. Esa es la verdadera guerra de los verdinegros. Y no precisamente la paliza de 20 horas de autobús que se pegarán futbolistas y técnicos para jugar en el Municipal 'El Morao' de Caravaca de la Cruz.
A Agustín Izquierdo, técnico templario, no le seduce lo más mínimo el partido de hoy (20 horas), que se completará en la vuelta, el miércoles día 19 en Jerez de los Caballeros. Pero lo afrontará con profesionalidad y con lo que tiene: Aragao en la meta (Álex será reserva en Copa), Maiquez, Julio, Ferreirinha, Cruz, Berto, Guillermo, Parra (autor del 1-0 al Santa Marta), Copito, Gonzalo y Barrero (Iván Fernández y Jacobo se sentarán en el banco). Es lo que hay y con lo que hay Izquierdo advierte que será difícil acabar la temporada. «Espero que haya fichajes», señaló a HOY, «los necesitamos. Si con apenas doce jugadores estamos a dos puntos del cuarto, yo no puedo decirles nada a los chavales».
El Caravaca de Paco Pliego (técnico) y Sívori (fichaje estrella de este verano, aunque últimamente sin jugar) es 16º del grupo V de la Segunda B y viene de ganar al Unión Estepona (0-1, gol de Elías)
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