EL GRANADA ENVIDIA LAS TECNICAS DE MIGUEL RIVERA

Publicado en: Canalrojiblanco

El malagueño Miguel Rivera aplica juegos de niños en el vestuario y vigila las zonas de marcha de Caravaca

A nadie debe sorprender en Granada que el malagueño Miguel Rivera haya sabido hacer del modesto Caravaca CF el flamante líder del grupo IV de la Segunda B. El ex del Écija Balompié o del extinto CD Linares, ya realizó una gran labor en el Granada 74 SAD, al que probablemente hubiera salvado del descenso a Tercera División en el supuesto de que los problemas económicos no hubieran dinamitado su vestuario y le forzaran a presentar la dimisión. Y todo, con una plantilla bien modesta de la que llamó la atención la sapiencia con la que supo sacar rendimiento a futbolistas veteranos tales como los ex rojiblancos Torres y Valero, o el ahora maracenero Teodorico Pérez 'Thierry'. Esa importante labor incluso

lo puso en la órbita del Granada CF en el mes de junio, poco antes de que el ex presidente Ignacio Cuerva resolviese por la contratación de Miguel Ángel Álvarez Tomé. Y es que Rivera contaba por entonces con el beneplácito de algunos directivos de peso de la gestora, que entendían que algunas de sus 'excentricidades' no debían suponer un lastre para que tomara las riendas del plantel.

Su candidatura al banquillo rojiblanco llegó a ser tan importante que algunos de sus allegados aseguran que incluso hizo planes sobre los integrantes del cuerpo técnico que lideraría. Así, tenía previsto 'echar mano' de Fernando Rodríguez, ahora preparador físico del Motril CF, y de otros dos grandes trabajadores, también procedentes del '74', a los que el tiempo terminó colocando en la propia entidad rojiblanca, pero por otros cauces. Se trata del fisioterapeuta Alberto Lara y del utillero Antonio Hidalgo.

Al no concretarse esta opción, Rivera apuntó como entrenador del Puertollano, donde no fructificaron las negociaciones por no ceder en determinadas pretensiones referentes a la parcela técnica y la manera de confeccionar la plantilla. Además, también sonó en la UD Melilla, pero fue en el Caravaca CF donde acabó estampando su firma. ¿Por qué? Pues debido a que la formación murciana sólo quiso tener en cuenta de su trayectoria su capacidad para sacar rendimiento a plantillas no muy excelsas. Y el caso es que la jugada le ha salido bien al debutante en Segunda B, donde el malagueño aplica con éxito sus curiosas, y muy efectivas, formas de trabajar.

Una de las cuales le ha llevado a trasladar al vestuario un juego de niños, el del 'amigo invisible'. Pongan las manos en el fuego por el hecho de que una de las maneras con las que sus jugadores evadieron la tensión de esta semana fue recorrer las tiendas de Caravaca para comprar los regalos con los que dar prolongación a tan curiosa iniciativa. Así hace vestuario el malagueño, quien por otra parte se muestra inflexible cuando se trata de mantener la disciplina. Y, para ello, no duda en convertirse en un buen 'espía'.

Bien que lo sabe un actual jugador del Caravaca CF, al que el malagueño sorprendió en la madrugada de un sábado, vísperas de un partido, saliendo con su chica de un establecimiento de cómida rápida. "Buenas noches" se limitó a decirle el preparador en aquel comprometido momento. Y claro, al día siguiente, y durante varias semanas después, procedió al castigo: banquillo, mucho banquillo, y grada, mucha grada.

Se desconoce si Rivera hubiera valido para el Granada CF (Tomé tiene más 'correa' y similares conocimientos), pero qué duda cabe de que se trata de un fenomenal profesional. Y todo, pese a sus rarezas.